No puedo vivir sin ti, una comedia que gira en relación a la adicción del celular

Crítica de “No puedo vivir sin ti” de Santiago Requejo (2024)

Una comedia romántica que aborda la problemática de la nomofobia, adicción del celular.

 

  Cuando el uso excesivo del teléfono te despoja de tu vida.

 Una comedia española protagonizada por Adrián Suar y Paz Vega dirigida por Santiago Requejo (Votamos, 2021).

“No puedo vivir sin ti” La vida de un hombre cuya estabilidad familiar comienza a desmoronarse debido a su dependencia al teléfono móvil.

Carlos (Adrián Suar), un ejecutivo ya en la mediana edad, es adicto al móvil. Está permanentemente contestando emails, haciendo videollamadas enchufado a interminables calls a cinco bandas. Sin embargo, cuando su mujer, Adela (Paz Vega), se planta y le dice que quiere el divorcio, su mundo se viene abajo. Busca una solución a sus problemas, y la encuentra en una terapia revolucionaria para adictos al teléfono móvil.

Una divertida comedia clásica, colmada de situaciones previsibles, no destaca en cuanto a originalidad, pero si por interpretación. Un guion aceptable que hace agradable a la narrativa, la abundancia de clichés le da un aire fresco a la cinta ya que el actor argentino demuestra su habilidad para hacer reír brilla con circunstancias destacadas y su destreza logra momentos graciosos. .

“Lo primero que hago al despertar y lo último antes de dormirme, es mirar mi móvil”, dice Carlos.

Una cinta que aborda como la adicción al celular puede tener un impacto significativo en la vida cotidiana de una persona, afectando su vida personal, profesional y relaciones.

 El punto de quiebre llega cuando Adela, cansada de los problemas de comunicación y su deterioro pide el divorcio, noticia que lleva a Carlos a enfrentarse con la realidad que venia eludiendo. Confrontando una consecuencia carísima, perder su familia por causa de un comportamiento obsesivo e inmaduro como lo es la adicción al celular. Situación que dirige a Carlos a una terapia para adictos a los móviles con el objetivo de recuperarlos.

En poco más de 90 minutos el film nos ofrece una propuesta convencional en que la trama radica en un celular y de la manera en como puede condicionar la vida de una persona, por otro lado, nos muestra que ante la busca de la perfección puede llegar a desarrollar una patología; Ambos elementos son un acierto en la película. Es interesante ver como nos plasman patrones de conductas como la codependencia, ansiedad, dificultad para establecer límites y priorizar necesidades propias. Los toques de humor otorgan un gran colorido dentro de un argumento donde un hombre pone su matrimonio en peligro debido a su adicción a su teléfono móvil con unos matices a remarcar que los incrusta de forma magistral Suar. Una dinámica a resaltar en el ida y vuelta con la terapia y sus intentos casi catastróficos en intentar recuperar a sus seres queridos, algo muy cómico de ver.

 

En síntesis, una comedia fresca y divertida, ideal para toda la familia, sin dramas ni conflictos innecesarios, con una dirección apropiada creando un ambiente ligero y gracioso que arranca sonrisas en más de un momento es bastante disfrutable desde el principio hasta el final.

Puntaje

3/5